martes, 25 de octubre de 2011

Algo de tristeza, pero nunca ira ni rabia...

Muchos de ustedes ya saben que no se pudo dar el trasplante anoche.  La razón principal es porque la familia del donante a último momento decidió no aceptar.  Es común que cuando tienen un donante potencial puede pasar que al final no se pudo hacer porque el órgano tenía alguna falla o no era del tamaño adecuado, etc. etc. más que nada razones médicas.  Es atípico que una familia que ya haya dado la oportunidad de compartir los órganos de un familiar luego lo cancele, sin embargo puede pasar y ellos tienen ese derecho y debemos entender y respetar sus razones aunque no las conozcamos. 

Debemos tener en mente siempre que aunque es un regalo precioso que alguien da hay mucho dolor en el proceso.  La persona era joven, imagino que con hijos pequeños, madre, padres y hermanos.  Son muchas circunstancias que tomar en cuenta en un momento de tanto dolor.  Así lo veo yo.  Esa persona a lo mejor en la mañana estaba haciendo planes con su familia, con sus hijos o padres y en la noche esos planes se desaparecen.  No debe ser fácil.  Por eso comprendo la negativa, me duele sí, pero la entiendo y la acepto.

Ayer fue un día de muchas emociones, creo que nunca había tenido tanta diversidad de sentimientos en menos de tres horas.  En tres horas pude experimentar miedo, alegría, tristeza, entusiasmo, tranquilidad, decepción, preocupación, euforia, fortaleza, paz, estrés mucho estrés (no lo puedo evitar), amor.... lo que si nunca sentí fue ira ni rabia.

Cuando me dieron la noticia fue súper diferente a lo que pensé sería.  Fue muy bueno realmente, no fue traumático.  En ese sentido debo agradecerles a los médicos su entusiasmo y positivismo.  Se veían más que dispuestos a luchar a dar la batalla y se veían súper preparados a cualquier eventualidad, eso me lleno de mucha tranquilidad.  De allí en adelante fue todo más sencillo.  Llegó mi mamá, luego llegó Carlos y empezaron a venir los doctores a hacer los preparativos (exámenes, instrucciones, etc.)

Vino el sacerdote y me dio la unción de los enfermos y conversamos un poco y oramos un poco con mi mamá.  El ambiente era sereno (o por lo menos para mí), tranquilo, tenía una tranquilidad que ni yo misma creía.  Los que me conocen saben que mi instinto es de preocuparme de una vez y siempre pensé que eso me pasaría cuando me avisarán, pero fue totalmente distinto.  Para pasar el tiempo me puse a jugar UNO con Carlos y luego a contar anécdotas de mi mamá y Darío, estábamos a risa pelada cuando llego el cirujano con la noticia. 

No les miento fue duro y aún lo es porque todo estaba saliendo tan perfecto.  Siempre es bueno que los amigos te recuerden que Dios no había dispuesto ese corazón para mí, que él tenía otros planes y que todo sería igual de perfecto.  Todavía es algo difícil, un poco de tristeza.  Lo único que pediré a Dios es que esos mismos sentimientos de paz, tranquilidad, fortaleza, alegría, entusiasmo me los mantenga cuando llegue una segunda oportunidad.

Les pido oración no solo por mi sino también por la familia que ha perdido un ser querido, por su dolor y que les de fuerza y resignación para manejar su perdida y por la persona que fallece para que la reciba con los brazos abiertos y para que en la otra oportunidad, le dé a la persona una muerte digna y sin dolor y que le dé a su familia paz en su dolor y fortaleza para aceptar sus designios y que sientan que ese regalo de vida significa continuación y no una perdida.

Los quiero mucho y no tendré vida suficiente para agradecerles su apoyo.  Seguimos pacientes esperando con la voluntad y gracia de Dios.

Nadia Sofia

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Nadia eres admirable, lograste entender el mensaje de Dios,sin pensar en sentimientos egoistas, lograstes entender los sentimientos de la otra familia y no solo los tuyos. Ese es el privilegio de los elegidos por Dios para cumplir misiones aqui en la tierra. Todavia te faltaba ese aprendizaje y el te lo moströ anoche, es una realidad que muchos de nosotros no habiamos entendido y aprendimos a traves de ti "La vida de una persona y la felicidad de su familia depende de la muerte de otra persona y la trsteza de su familia" Una vez que comprendamos esto y pensemos y oremos por la contraparte estaremos listos.

Anónimo dijo...

Querida Nadia,

No tuve la oportunidad de conocerte personalmente (lo cual lamento profundamente), pero gracias a una amiga muy querida que me envio este blog, tuve la oportunidad de conocerte espiritualmente.

Es una pena muy grande la que siento en este momento; supe de tu partida terrenal esta madrugada y la verdad estoy bien triste.. No puedo siquiera imaginar lo que estan sintiendo tus familiares y amigos cercanos en este momento, porque para mi se torna inimaginable =(

Conversaba con mi amiga hace unos minutos y le decia que aunque es dificil entender los designios de Dios y aunque es muy duro aceptar que te llamo a su lado despues de haber luchado tanto, entiendo que el Cielo esta necesitando Angeles Guerreros como TU porque la lucha contra el mal cada vez se hace mas dificil. Me conforta mucho el hecho de saber que Dios te recibira con los brazos abiertos y de que te fuiste con el corazon lleno de paz; ese mismo corazon que inspiro a tantas personas durante todo este tiempo a luchar, a salir adelante y a no dejarse vencer antes las adversidades de la vida.

Dios te bendiga en dondequiera que estes y nos de la resignacion necesaria a todos los que estamos acongojados y entristecidos por tu partida. No es un adios, sino un hasta luego, porque se que algun dia todos nos volveremos a ver.

Con todo cariño,

LV

Venicia Chang dijo...

Con el nudo que aún siento en mi garganta y el pecho apretado por tu partida, solo puedo escribirte que fue un placer haberte conocido y que personas como tú son las bendecidas por Dios para realizar los cambios que las sociedades necesitan. Estoy convencida que no has arado en el mar.... y que las semillas plantadas por tí, a través de tu lucha, servirán para que muchos sigamos adelante y que tu sueño se haga realidad.
TQM,
Venicia Chang

Anónimo dijo...

Descance en paz y que Dios la tenga en su gloria.

Me llegó mucho leer las palabras que estan en este blog. Realmente necesitamos hacer conciencia en cuanto a la donación de órganos.

Es muy duro, pero también pongamonos en los zapatos de los otros.
Como Dios nos dió en su mandamiento. "Amarás a tu prójimo como a ti mismo".

Mucha fuerza, y resignación a los familiares y amigos.

Lourdes Garzón
Manta-Ecuador

Anónimo dijo...

Es un dolor inmenzo el saber que te has ido Nadia, amiga siempre estarás en mi mente y corazón .

Dios te ha llamado antes para que formes parte de sus angeles yo estaré aquí hasta que el me llame y les acompañe , cuanto siento por tu familia y oraré para su resignación.

Amiga nos vemos un beso grande
Flor